19/6/09

Editorial

En la semana que pasó, entrando en el tramo final de la campaña electoral, ha habido algunos cruces entre candidatos en los cuales se mencionó el tema de una nueva ley de medios y también se dijeron algunas predicciones y amenazas sobre lo que podría pasar con los medios de comunicación en la Argentina y la llamada libertad de prensa.
El diario Crítica le preguntó al candidato Francisco De Narváez si se puede tener acciones en medios de comunicación –como es su caso, en el canal América y el diario El Cronista- y ser diputado. Algo que está expresamente prohibido en el nuevo anteproyecto de Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. De Narváez respondió: “En la nueva Ley de Radiodifusión debería tratarse cuál es el vínculo entre un funcionario y un medio de comunicación. Hoy no está reglado y por eso no violo la ley. Pero sí entiendo que hay un conflicto de intereses.”
“El proyecto seguramente no saldrá de usted”, le dijo entonces el entrevistador.
Entre risas, De Narváez contestó: “Sí, ¿por qué no? No hay problemas. Lo que no se puede hacer es proponer una nueva Ley de Radiodifusión en medio de la campaña.” Y manifestó su preocupación por “la reglamentación de la ley de blanqueo de capitales”, porque -dijo- “se puede direccionar el dinero sin explicitar el origen, para comprar medios de comunicación”. “Es invitar a que se tomen los medios tal vez con dinero mal habido. Eso es peligrosísimo”, dijo De Narvaez.
También dijo que no tiene dudas de que “si Kirchner gana en la provincia, aunque sea por un voto, avanzará sobre la propiedad privada, la libertad de prensa, los medios de comunicación y el sistema financiero”. Y que va a tratar de controlar todo.
En otra entrevista, esta vez con el Canal 26, De Narváez también dijo que su temor es que si pierde, en los cinco meses que restan hasta el cambio de autoridades en el Congreso, “un Kirchner herido vaya por todo eso, con una Ley de Radiodifusión que pretende silenciar voces”.
A de Narváez, Kirchner le contestó que se presente a declarar y que aclare sus llamadas telefónicas con el denominado Rey de la Efedrina, por las cuales lo citó el juez Faggionatto Márquez, que a su vez fue recusado por el candidato.
Quien sí contestó sobre lo que De Narváez había dicho fue el interventor del COMFER, Gabriel Mariotto: le recordó que el candidato del PJ disidente es propietario de algunos medios "de acuerdo a la ley de la dictadura”, y aclaró que “lo que nosotros proponemos para la ley de la democracia es que ningún funcionario público ni representante del pueblo en el Congreso pueda ser dueño de medios de comunicación". Además, dijo que "la situación de De Narváez a cargo del grupo América 2 es bastante irregular".
Otro cruce fue el de Kirchner con Clarín. Uno más.
La cosa comenzó el domingo pasado, cuando el diario publicó un artículo de tapa en el que afirmaba, sin fuentes constatables, que el Gobierno nacional analizaba la posibilidad de adelantar las elecciones presidenciales al 10 de marzo de 2010 en caso de una derrota en la provincia de Buenos Aires.
En un acto en Capital Federal, Néstor Kirchner, dijo que Clarín pone "en riesgo la paz social y la institucionalidad de la Nación" y ratificó la necesidad de "democratizar los medios de comunicación en nuestro país" porque "la democracia no soporta monopolios mediáticos".
Estas son algunas de las muy pocas cosas que se dijeron esta semana en la campaña electoral sobre el tema que nos ocupa en nuestro programa, que es el anteproyecto de Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual o, si prefiere, una nueva ley de radiodifusión. En el plano local, el tema no es motivo de mención casi para ningún candidato y, tampoco, de pregunta en la mayoría de los casos. El silencio sobre el tema no es patrimonio de los grandes medios nacionales sino también de sus filiales locales, que las hay. En tal sentido, permítanme que me pregunte en voz alta desde la siempre criticada radio del Estado ¿Y la libertad de expresión? ¿Es solo para hablar de algunos temas? ¿No es importante saber qué piensan los candidatos sobre una de las dos peores herencias legales sobrevivientes de la dictadura militar?
Nada más sobre la campaña. Lo dijimos desde el comienzo: nuestra intención es que, más allá de la suerte que este proyecto pueda correr en el Congreso o de los intereses que lo impulsen, creemos que vale la pena que por primera vez en muchos años el tema de los medios pueda ser discutido públicamente y democráticamente. En eso estamos.

José Luis Ferrando